domingo, mayo 15, 2011

decimonónico, hipnogógico, alienado. un relato lacaniano

recién despiertos, hablábamos de las alucinaciones hipnogógicas. de esas cosas absurdas que se nos presentan entre la vigilia y el sueño, pero también de mis bragas. él dice que se le aparecen formas, colores, algo claramente gráfico que se transforma... yo le cuento que las mías, mis alucinaciones (no mis bragas), son relatos psicodélicos mezclados con fragmentos cotidianos, palabras racionalistas y conceptos tan delirantes que anticipan la pérdida de conciencia. ¿quién sabe si el deseo está alienado por el lenguaje, como sugería lacan, o si adaptamos nuestras pulsiones a nuestras ocurrencias lingüísticas para explicarnos algo de nosotros?, eso nos preguntamos, recién despiertos, comiendo sushi a deshora, tomando un vaso de agua y soñando con un café imposible. no son dibujos sino palabras las mías, mis alucinaciones. aunque él está aquí, de nuevo, llenándome de piel sin palabras. y de nuevo me quedo sin relato. sin mango ni sartén, ni mando. apenas con una porción de positivismo decimonónico para tirarle por la cabeza, para defenderme de este amor irrevocable, que me queda hondo cada vez.